Con estas decepciones
construiré los eslabones
de la cadena.
Y será fuerte y robusta.
Perdón y olvido para la bilis
y los desplantes propios y ajenos,
aliño de malas caras
en espejos opacos
donde distorsionar
la falta de vitamina B12.
Con tu doble vara
mide mi sonrisa
mide mi mueca de asco
valora mi nausea
en la justa medida
en que te sientas capaz
de aceptar la inmadurez
como una forma de conveniencia.
Esperar puede ser fuente
de infaustos contratiempos
contra los que los muros
se partan el alma
y yo me desolle los puños.
Con estas decepciones
que el mundo desvela
en la balanza vencen
a los gestos vanos
y los labios cortados,
los abrazos que se olvidan.
Una cadena que me atará
a tu infortunio.